Una sesión de reiki


¿En qué consiste?
Una sesión de Reiki puede durar aproximadamente cuarenta y cinco minutos. El paciente permanecerá acostado en una camilla, descalzo y vestido.

¿Qué se siente?
Durante un tratamiento, se siente una relajación profunda, una gran sensación de paz. Muchas personas se quedan dormidas, cosa que no influye para nada en el resultado final, algunas sienten un cosquilleo, calor o frío en diferentes partes del cuerpo según fluya la energía, otras personas ven colores, experimentan una sensación de "flotar" o sienten emociones que salen a la superficie y otras no sienten nada y no por ello el Reiki no está funcionando.

Crisis de sanación:
La palabra crisis en si a mi no me gusta nada, porque suena muy catastrófica, pero pienso que es bueno advertir a los pacientes de los cambios que pueden sufrir durante un tratamiento de Reiki.
La realidad es que una sesión de Reiki equilibra la energía de la persona que la recibe, desbloquea los chakras, pero sobretodo con las primeras sesiones ocurre, que solemos volver a los antiguos patrones energéticos y la energía vuelve a bajar al cabo de unos días. Esto es lo que puede llamarse "Crisis de sanación" porque un paciente que esta bien, y al cabo de unos días vuelve a tener las mismas molestias o quizás otrás que se refieren más a la limpieza de un chakra en concreto, por ejemplo dolor de garganta, una diarrea, un resfriado con mucha mucosidad, puede pensar que el Reiki no le esta funcionando.
Esto forma parte del proceso y no tiene nada de mala, al contrario, nuestro cuerpo esta reconociendo el nuevo equilibrio energético y esta reaccionando sacando al exterior todo lo que no necesita.
De todas formas no todas las personas viven esta crisis de sanación y no todo el mundo la vive de la misma forma.
Los síntomas más significativos son sensación de náuseas, vómitos o diarrea sin explicación aparente, dolor de garganta, enfado o malhumor, o tener los sentimientos a flor de piel.

Hay que dejar que el cuerpo elimine de la forma que considere necesaria, no pensar que el Reiki le ha ido mal, porque cuanto más recibas Reiki, antes volverás a establecer el equilibrio enérgetico, y pensar que esto forma parte del proceso de sanación. Sin más.


Duración del tratamiento:
El Reiki suele actuar de forma progresiva y los resultados se aprecian normalmente a partir de la segunda o tercera sesión. El hombre es una unidad holística, por lo tanto hay que tratar todos sus planos para llegar a conseguir unos óptimos resultados.

En el primer día se trabaja el campo mental, donde se desbloquean antiguos pensamientos negativos. En el segundo día vamos al campo emocional donde se realiza el desbloqueo de emociones reprimidas, estancadas en el subconsciente. En este día y hasta el tercero puede haber movilización emocional en forma de enfado, ira, llanto, angustia o depresión. Salen a la luz sentimientos reprimidos.En el tercer día trabajamos el cuerpo vital y el cuarto día se finaliza con el drenaje en el cuerpo físico. Es por eso que se recomienda realizar 4 sesiones lo más seguidas posible y luego se pueden tomar sesiones individuales.

Personalmente, mis primeras sesiones de Reiki me dejaron tan relajada que no me lo podía creer, salía como flotando de la consulta. Tuve un día de molestias en la garganta, que se fue tan rápidamente como empezó, y los beneficios que me aportó y me aporta en la actualidad, compensaron esas pequeñas molestias.

Después decidí iniciarme en el aprendizaje de Reiki, en varios de sus niveles, para así poder usarlo libremente para mí , mi entorno y toda persona que lo necesite. Después de los cursos, es más habitual tener crisis de sanación mucho más evidentes que en los tratamientos, ya que en éste caso estas pasando a un nivel energético y vibracional mayor, pero Reiki te aporta tanto, tanto, que solo son pequeños inconvenientes que se pasan sin más.